Los excrementos son otro rastro interesante para determinar los animales que hay en un determinado lugar. Por su forma, tamaño, color, posición y por su olor (si, su olor) podemos saber, con un poco de práctica, quién fue el que tuvo un apretón. Tampoco es una ciencia exacta, pero sumado a otros indicios como las huellas sí podemos asegurarnos en un 80 - 90%
Primer grupo de animales son aquellos que dejan numerosas bolitas esféricas u ovaladas de distinto tamaño. En este grupo encontramos los ungulados, como ciervos, gamos, corzos, jabali, y tambíen a los conejos.
Excrementos de conejo |
Después tenemos a otro grupo de animales que nos dejan la típica salchicha o churro, mis queridos carnívoros. Entre los carnívoros hay uno un tanto delicado que le gusta hacer sus necesidades en un, digamos, water. Se trata del tejón. Éste realiza un pequeño agujero, llamado letrina, donde va depositando sus necesidades hasta llenarlo. Después hace otro. Normalmente lo hace cerca de sus guaridas, así que, si vemos varias letrinas es muy probable que la tejonera (guarida del tejón) esté muy cerca.
Otro carnívoro que también realiza sus deposiciones juntas es la gineta. Busca algún sitio elevado, como una gran roca, donde se van acumulando numerosos excrementos.
Excrementos de Gineta |
Después tenemos al típico churro aislado. Aquí entra nuestra pericia para poder identificarlo, como dijimos antes, por su color, tamaño, forma y olor. Una norma fundamental, si vais a empezar a oler excrementos, hacedlo con una mascarilla, pueden contener parásistos y bacterias.
Excremento de garduña |
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